martes, 18 de junio de 2019

De mí, para ti.

Cuando me apetece escribir es cuando realmente peor estoy; y me gustaría que no fuera así. Ojalá la inspiración viniera a mi sin razón alguna, para hablar de cualquier tema. Realmente escribir nos sirve como desahogo, bien puedes escribirlo claramente o escribir en códigos que solo tú descifras.

Quien me conoce un poquito y lea mi enrevesada mente entre líneas podrá intuir de qué o de quién hablo, se puede dar por aludido o quizás ni llegue a leer estas palabras. Todavía no he encontrado a alguien que realmente le interese mi blog, aunque sí que ha habido una única persona en molestarse y comentarme que le parece mi redacción. La verdad es que en lengua sacaba un -5 en las redacciones.

A veces, cuando hablo ni coordino las palabras y me quedo paralizada como muda sin saber que decir, últimamente me pasa muy a menudo.

No me da miedo a perderme entre el mundo, sé que tengo que encontrarme. La verdad es que me da miedo perderos, sí a vosotros que sois quienes os molestáis en leer. Siempre envidié esa atención que tenía ella a todas sus palabras, leía su twitter y su blog siempre, y de ahí sacaba conclusiones. También desearía que el amor de mi vida entendiese todas las palabras escritas, aunque le tocaría descifrar demasiado, pero si me preguntas estoy dispuesta a decirte de qué se trata. Otras entradas están escritas a personas concretas, pero sigo un patrón para referirme a vosotros en código.

Nos da miedo mostrarnos al mundo por miedo al rechazo, admito que tuve mi orgullo y deseo se convirtió en “enfado” (vaya empiezo a hablar entre mentes).

-Sí entre mentes, porque siempre encontrarás alguna palabra/situación que tiene que ver contigo-

El tiempo corre y corre, me ire un 03/60/9102 y me preocupa más la vuelta que la partida. Comenté que tenía miedo a perderos. Hoy hablo claramente, con la tele encendida y siendo el cumpleaños de alguien el mundo.

Existen emociones, ilusiones e incluso pensamientos que no tienes, ojalá me pudiera tomar la vida como con ellos, se me corta la vida cada vez que le pongo empeño y terminas desentendiéndote, para ti la vida fluye despacio, para mi demasiado rápido; pues me gusta sorprender y seguir explorando, me gusta tener una idea de lo que será de mi en una semana, por ejemplo, en la cual, probablemente esté en Córdoba. Ojalá mis ganas de comerme el mundo se conviertan en tuyas y al menos compartirlas. Tengo tantas ganas de seguir experimentando contigo.

Hola, soy una chica de detalles para todo, detalles objetivos y subjetivos detalles que de vez en cuando (en realidad siempre) nadie se percata. Aunque como de costumbre aparentar todo lo contrario a lo que soy se hace pesado ante el mundo y la verdad es que la vida siempre me las pone de pena para socializar y hablarle al mundo. Y os admito que mis ganas están sujetas a mis ánimos de ese día.

Me da miedo cambiar mi mundo y que el siguiente mundo sea tan satisfactorio que me quede idolatrada, me aferro a lo que tengo.

Con cariño Maura.

De mí, para ti (si te das por aludido/a).


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