sábado, 1 de octubre de 2016

Lluvia de lágrimas

Son de estas veces en las que no es lo mismo decir a que te digan, que si recuerdas rodas las balas no pérdidas que atravesaron tu pecho lloras, pero no de risa.
Porque no hay impotencia más grande que no sea la mía, me tropiezo y apenas avanzo; no logro salir de este camino, no consigo tener ese foco de luz encendido y apenas sobrevivo ¿Qué sería de mi si no revivo? Las marcas de mis lágrimas incrustan nuestra preciosa flor y nunca llegué a comprender porqué se marchitó, no siento tu calor, perdí todo el valor; convenceme ¿Como sobrevivo sin ti? Eres todo lo que quiero tener y a tu lado todo lo que no soporto; olvido de donde sale tanto reencor guardado y de vez en cuando pienso que es lo que te mantiene viva; reprochandome lo poco que me queda en el interior. Te quise de manera incomprensible, te necesito tanto como el aire y soporto mucho más de lo que debería.
Y de verdad que alejarte de mi vida es como quitarme parte de la mía y sin saber porqué ya que todo lo que me das apenas me llega para sonreír.
Según mi ley todas las palabras que te dedique si no fueran para ti sería lo más absurdo y falso de mi vida con el resto, que egoísta de nuestras parte prohibirnos la palabra más sincera de este mundo "te quiero"; pero la verdad es que apenas lo siento, no me das más motivos que sentirlo por lo que eres para mi.
Te necesito; porque no hay madre como tu, que no sea tu falsa sonrisa la que me diga un "hasta luego" y aunque ni tu misma entiendas porqué eres así desde hace algún tiempo, te entiendo o por lo menos trato de entender toda esta situación que fluye entre tu y yo.
Y ¿Sabes? Son mis lágrimas las que no dejan que me rinda porque sé que si salen es porque te necesito.
Soporto cada reproche, cada grito, cada mirada de desafío, cada desprecio en cada sílaba y no me mantengo con fuerza para caer y levantarme; yo caigo y me tropiezo al mismo tiempo.
¿Decirte "Adiós"? Jamás aunque pasen 50 años.

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