domingo, 2 de agosto de 2020

Kilometros que parecen centimetros

Mientras me intento calmar en un sin fin de nervios, mientras siento recorrer el temblor por mi cuerpo cada vez que pronuncias esas palabras. Me dan asco y sentirlas de nuevo solo me llevan a ese pasado tan horroroso que provocaste con tus actos.
Y duele joder, duele que llames para recordarme lo mala hija que soy por no darte la razón, querido pariente, ya tengo casi 21 años, necesito que me trates como una adulta y no como la cría de 12 años a la que odiaste por ser testigo de un maltrato. De TU maltrato y querer compartirlo con el mundo.

Y sabes? Aunque los kilómetros nos separen, siempre logras atravesar mi pecho y haces que te sienta a mi lado con esas palabras tan absurdas y grotescas que salen de tu boca.

Ansío el día en el que logres comprender que yo no tengo nada que ver con el odio que llevas dentro.
Ansío poder hablar contigo sin pensar las cosas 4 veces solo porque sé que puedes herirme.
Ansío tener libertad de pensar como quiera y que no por ello me atormentes.

Nunca he dicho que ojalá no  me hubiera pasado nada de esto porque entonces, no sería lo que soy ahora. Y la verdad es que me encanto tanto que odiarme sería un pecado que no estoy dispuesta a cometer. Te odio a ti y a vuestro maldito encuentro quizás, jajaja...

Ojalá que algún día logres comprender lo que supone ser la sombra de tu vida, sombra que no dejas escapar y terminas atribuyéndome a mi, yo, M____ por llevar la misma sangre y ser mujer.

Espero que algún día logres ser feliz y dejar ser feliz a los demás sin volver al pasado.

Sin título

  Y entonces ese gélido hielo sigue sin deretirse y por primera vez en poco tiempo que comparto mi vida a su lado, noto como una presión en ...